Mapa de Procesos y Procedimientos de la UEx
La Universidad de Extremadura cuenta con un mapa de procesos y procedimientos que refleja, de manera estructurada, las actividades esenciales que desarrolla la institución. Dicho mapa está concebido a dos niveles: por un lado, se definen los procesos que competen a la UEx de manera global; por otro, se establece la posibilidad de que cada centro o servicio cuente con procesos específicos para atender sus particularidades y cumplir con la política y los objetivos de calidad previamente fijados.
Con el objetivo de facilitar la difusión y la adaptación del Mapa de Procesos a la realidad de cada Centro, se ha preparado un fichero fuente editable que permite incorporar modificaciones y personalizaciones de manera ágil. Asimismo, se pone a disposición un fichero en formato .png para su distribución y consulta más sencilla entre los distintos colectivos de la Universidad.
Como se puede observar, en el primer nivel, los procesos de la Universidad se organizan en tres categorías principales:
- Los procesos estratégicos orientan la dirección institucional y abarcan cuestiones como la planificación, la definición de políticas y el seguimiento de planes de mejora y acreditación.
- Los procesos clave están directamente relacionados con la misión formativa y académica, incluyendo procedimientos de acceso de estudiantes a las enseñanzas de la UEx, la organización y evaluación de las titulaciones oficiales, así como la formación del personal docente, investigador y de administración.
- Los procesos de soporte garantizan los recursos y servicios transversales necesarios para el correcto funcionamiento de la institución, tales como la gestión de la información, el control de indicadores, los servicios de prevención y la evaluación continua de la satisfacción de la comunidad universitaria. En muchos de estos procesos se cuenta con el apoyo esencial de la Unidad Técnica de Evaluación y Calidad (UTEC).
En el segundo nivel, cada centro o servicio de la Universidad puede desarrollar procesos específicos que se ajusten a sus necesidades singulares y contribuyan al logro de la política y de los objetivos de calidad establecidos de forma global. Esta autonomía permite a cada unidad adaptar y complementar los procesos definidos a nivel institucional, incorporando, por ejemplo, procedimientos diferenciados de promoción de la igualdad, seguimiento de titulaciones o encuestas de satisfacción específicas para su realidad formativa e investigadora.